31 de diciembre de 2009

Último día 2009

Llegó el último día del año...
Cómo si cambiara mucho con el que le sigue, que es el primero del próximo...
No creo que se me vaya a ir el grano que me salió en la pera sólo porque empiece un nuevo año...
Todo seguirá más o menos igual que en los días anteriores...
Y como es de eso justamente de lo que estamos huyendo, de la rutina y monotonía, seis mujeres de diferentes estilos, edades, estaturas, tamaños bustiales y colores de pelo decidimos refugiarnos en un confortable departamento de la ciudad feliz, para romper con tradiciones típicas de las fiestas de esta época...
Lo cómico (o no tanto) es que nos pasamos el día intentando descifrar el por qué de las cosas: desde por qué la gente siempre come lo mismo en las fiestas hasta por qué, seis mujeres como nosotras (inteligentes, divinas, sensibles, buena gente) estamos solas...
En algún momento encontraremos las respuestas. No nos damos por vencidas. Ni aún vencidas.
Después de una larga y divertida jornada playera, nos dividimos las tareas para celebrar el fin de año. Comimos rico, tomamos bastante y a las 00 hs. un brindis con champagne para que las burbujas aviven nuestros nuevos y buenos deseos el año entrante.
Para reemplazar las doce uvas de las 12 horas., cada una de nosotras escribió dos objetivos y/o metas para realizar durante el transcurso del año, los cuales dependerán solo de nosotras para poder ser logrardos.
Cuando esté por finalizar el 2010 tendremos que reunirnos para leer las metas de cada una y develar si fueron o no logradas.
¿Las mías? Por ahora son un secreto. Estoy segura que podré alcanzarlas... Con esfuerzo y buena voluntad... como de costumbre.
Empieza un nuevo año. Una nueva etapa en curso.
Dos ilusiones ser irán a volar. Pero otras dos han venido.
¡¡Feliz Año Nuevo!!

Cuenta regresiva

Llegamos a Mar del Plata en el horario estipulado...
No hace calor, pero hay humedad...
El paisaje visto durante viaje desde la terminal hacia el departamento, me pareció espantoso...
Caminamos unas diez cuadras y terminamos comiendo un suculento Cuarto de Libra para recobrar las energías perdidas...
Peatonal, negocios, gente, semáforos, luces, ruido...
Chicas: si no veo el mar, voy a creer que me engañaron y estoy de vuelta en Buenos Aires...
Apenas pude divisar una espumita blanca desde la vereda de enfrente...
De regreso al departamento nos pusimos al día con nuestras historias de vida... Creo que voy a tener que cambiar la estrategia, porque me estoy quedando en el tiempo...
El año nuevo es un buen comienzo para retomar la tradición que me acompañó durante tantos años y que, además, tanto extraño...
Hasta el momento, me desentiendo del apodo "La Feliz" a esta ciudad idéntica a Buenos Aires, pero con mar...
En algunas horas se nos suma Mer a nuestra celebración de fin de año...
Hace frío... qué lindo es dormir con frazadita!!

30 de diciembre de 2009

Úlitmo momento

Si el refrán dice que los martes no te cases ni te embarques... por algo será!!
Y si bien no me sucedían puntualmente ninguna de las dos cuestiones, fue uno de esos días en que me hubiera gustado quedarme un ovillito en la cama y tapadita con la sábana para contrarrestar el aire acondicionado...
En cambio fue día de ultimar detalles y poner todo en su lugar antes de partir...
La noche anterior, cené con las chicas... Despedimos el año y conversamos sobre nuestra próxima escapada...
Me acosté a cualquier hora y tomé una cantidad considerada de cerveza...
Entonces cuando el despertador sonó a las 9 a.m. no entendía absolutamente nada...
Confirmo que cuando pierdo el ritmo, me pongo de mal humor... No sé hacer las cosas apuradas y sin embargo siempre salgo airosa de la cuestión límite...
Terminé de depilarme, hacerme lo pies, armar el bolso y almorzar con el tiempo justo...
Todo a las corridas y acompañada de los treinta y pico de sensación térmica afectados por la incasable humedad y un pequeño chaparrón de verano porteño...
Después de siete cuadras arrastrando valija con rueditas y mochila al hombro, me encontré con Flor en la parada del colectivo para rumbear hacia la terminal de Retiro: lugar desde donde la gente suele retirarse de la ciudad hacia otros destinos. (¿será que por eso se llama así?)
Por suerte, el micro salió a tiempo y a no más de los 15 km recorridos y con el sonido acunador de la lluvia golpeando en la chapa del techo, ya estaba dormida...
Además, contrastando el clima exterior, el clima en el micro (casi que se nos escarcha la nariz del frío que hacía) me relajó por demás...
A la hora me desperté enredada en la campera y soñando con todas las cosas que me había olvidado en casa.
Aunque hubiera querido, ya no entraba una alfiler en esa saturada valija.
Y estoy casi segura que de todo lo empacado usaré, como mucho, la mitad...
Un mal femenino del cual yo, evidentemente, tampoco estoy exenta...
En unas horas llegamos a la ciudad feliz... y se develará el gran misterio de saber por qué ha sido bautizada con ese apodo...

29 de diciembre de 2009

Bienvenida a casa

Despertarse con una buena noticia es bastante inusual para estos días...
Por suerte en la mañana del día de los santos inocentes, Isabel regresó a casa...
Después de ocho días complicados pero reparadores, las nanas sanaron y fue momento de volver a empezar...
Durante ese tiempo de espera, la cabeza giró por cientos de lugares que creí impensados sólo unos días atrás: desde la edad, la vejez y el paso del tiempo, pasando por el futuro incierto, el señor alemán que altera el pensamiento y te hace hablar idioteces 23 horas al día... hasta la familia, los amigos, los que quedan, los que se van yendo, los que regresan... y los que perduran.
Un sacudón para reanimar el efecto invernadero en el que parezco pararme cuando el tallo se dobla... pero que aún sigue intacto.
Un refuerzo para recordar el camino que queda por andar y lo mucho que debo disfrutarlo...
Mañana viajo a la feliz...
Y estoy feliz!!

24 de diciembre de 2009

Anochecer de un día agitado...

El despertador sonó a las 7:40 a.m.
Me reconfortó saber que es el último madrugón del año para ir a trabajar.
A esa hora el calor ya era insoportable.
Me dí una ducha rápida y me vestí con ropa cómoda para hacerle frente al clima de un verano húmedo y pegoteado.
Una última reunión, unas palabras de despedida, augurios de felicidad y merecido descanso y un abrazo para reencontrarnos el próximo 17 de febrero.
Luego, una visita casi obligada con la peluquería que se prolongó hasta más de las cuatro de la tarde.
Llegué a casa, otra ducha y comencé los preparativos pertinentes para la celebración de los 30 años de mi buena amiga...
Rumbo a la ribera porteña, nos encontramos listas y libres para disfrutar del aire y unas cervecitas frías en buena compañía.
El día me pareció eterno.
Y supongo que por sobre todo fue la carga emotiva colándose entre lo más cotidiano para lograr de un miércoles caluroso una suerte de fecha para no olvidar...

22 de diciembre de 2009

Menú festivo

Hace unos años convoqué a mis amigas y famila a reunirnos para celebrar las fiestas, con una cruzada contra la ensalada rusa...
Sí, es rica... ¿pero siempre se tiene que comer lo mismo en Navidad?
Es como esa gente que arma un menú estable de lunes a domingo, sin repetir y sin soplar...
Entonces siempre se tienen en cuenta las mismas opciones: que huevos rellenos, que vitel thoné o no, mejor un matambre...
Vayas donde vayas, la gente se vuelve loca y llena todo de mayonesa.
Uuuff!!! Basta! Me aburre siempre lo mismo...
En casa celebramos el 24 a la noche y me toca cocinar a mí...
Así que opté por un menú sencillo, rico y con sabor a fiesta que nos gusta a todos...
Serán unas navidades un poco especiales teniendo a la abuela recuperándose de una neumonía un poco lejos de casa...
Pero sabiendo que es por su bien y un pronto regreso a la casa Morelos, haremos un chinchín en su honor...

21 de diciembre de 2009

Llegó el verano

Cada vez que hace más de 26º a la sombra recuerdo lo poco que me agrada el verano...
Viajar en el colectivo es casi una tortura, caminar antes de las tres de la tarde por alguna veredita porteña, imposible...
El verano es para estar de vacaciones en la playa, o en un jardín con reposeras y pileta...
Buenos Aires se pone pegajoso y bastante fastidioso en esta época...
Por suerte falta poco para que se terminen las reuniones laborales y comenzar un merecido descanso...
Mientras tanto, el agua de azahar y las nueces invaden mi casa con sus aromas y texturas... con olorcito a Navidad...

18 de diciembre de 2009

Final de finales

Ya está. Terminó el 2º año de facultad. Rendí todos los finales: aprobados, pasados, logrados, y con los apuntes archivados.
Cuando me enteré la nota de la última materia estaba con Ornella y Cata... Saltamos y gritamos juntas de la alegría... Necesitaba descargarme después de tanta tensión y estrés.
Así que sumo otro motivo más para levantar la copa y celebrar en estas Fiestas, que a pesar de estar sola de pareja nuevamente, me encuentro colmada de las consecuencias de los logros y conquistas gracias a mis esfuerzos y perserverancias, los que me hacen reencontrarme con la vida con una visión y misión diferente.

17 de diciembre de 2009

Hasta luego...




Hoy terminaron las clases y me despedí de los gurrumines de 2º grado... apretando fuerte la garganta para que no se me piantara ni un lagrimón...
Realmente nos divertimos de lo lindo: bailamos, cantamos, hicimos un súper picnic, contamos chistes y nos dimos miles de abrazos, besos y palabras afectuosas, llenas del más genuino y auténtico cariño que se puede recibir día tras día.
Me siento plena, satisfecha y feliz...

Siento que di lo mejor de mí y de la manera más fluida y sincera, lo cual me colma de tranquilidad y felicidad el alma y el corazón...
Reafirmo que fue un año maravilloso, y sobre todo porque recuperé la espotaneidad de reirme de lo más simple, natural e ingénuo de cada día...
Gracias por brindarme dieciocho sonrisas llenas de agujeritos que colmaron los baches de los días grises y me dieron la chance de volver a creer en la emoción de trabajar con pasión...

16 de diciembre de 2009

Setenta y ocho años

Para vos todo: todo mi ser, toda mi alma, toda mi risa y todo mi llanto...
Para vos el sol, las estrellas, la tierra y el mar...
Para vos un mundo de mimos, abrazos, palabras y canciones...
Todas las flores, las plantas y los limoneros también son para vos...
Mis sueños, mis versos y mis poesías...
Toda mi voz y todo mi canto; todo mi llanto y todo mi grito.
Para vos todos los números, todas las letras, todas mis manías y todos mis caprichos...
Mis tristezas, mis alegrías y también mis ilusiones...
Para vos mis tortas y mis deseos...
Para vos mil lunas, mil mares, mil sueños y mil gracias...
Todo mi ser, gracias a vos...
Feliz cumpleaños abuela!!

15 de diciembre de 2009

Plan V

Hoy apliqué la frase que mi abuela suele apelar cuando las cosas no salen como esperaba: no hay mal que por bien no venga... Y por supuesto, una vez más tiene razón...
Como todos los lunes, me costó más de lo previsto aceptar que el despertador sonó mucho antes de lo que esperaba...
El día cambió de un minuto para el otro y después de una mañana cargadita, ya me había imaginado una lectura al solcito para los finales que quedan...
Resulta que cuando estaba más cerca de casa que de Palermo, me di cuenta que me había olvidado el celular adentro de una bolsa llena de libros...
Realmente no es un aparato imprescindible en mi vida, y sin embargo sin pensarlo demasiado di la vuelta y volví a buscarlo...
Charla telefónica por medio gracias al móvil recuperado, desvié mi camino y cambié lectura por charla, solcito por sillón y estar sola por compartir en compañía...
Cero estudio y muchas puestas en común, recuerdos de experiencias vividas y sueños de las que están por venir...
Un plan inesperado, espontáneo, genuino y muy productivo...
A veces librarse al azar del destino da buenos resultados...
O en realidad será que hay que tener herramientas para enfrentar los posibles desvíos que nos depara la vida...

14 de diciembre de 2009

Palabras más, palabras menos...

El sábado volví a disfrutar de un emocionante y sorpresivo concierto de mi queridísimo Salmón...
Con un repertorio de lujo, grandes invitados sorpresa y el mismo e inconfundible talento calamarense...
Reviví una noche con los sentidos a flor de piel, permitíendome volver a emocionarme con las canciones de siempre y las más nuevas... recordando lo que la poesía de estas letras me trae a la memoria cada vez que me deleito y aclamo una manifestación artística de tal magnitud...
Todas y cada una de las palabras con las que describa este momento, difícilmente podrán superar las sensaciones con efectos secundarios...
Sigo sumando inolvidables momentos a este año que se escurre entre los dedos...
Y una frase que se niega a volarse con el viento...
Es una cuestión de amor extraño
de amor a pesar de todo
Pido por favor una dósis de amor
que nos parta en dos a los dos...
Hay momentos en que una canción vale más que mil palabras...

11 de diciembre de 2009

Friday: I'm in love

Se acerca el fin de semana... con olorcito a reuniones, amigos, cervecitas y picadas, charlas, canciones y emociones para seguir soñando... y por qué no, alguna sorpresa.
Todo lo que me convoca a sentir amor por la vida, por lo simple y cotidiano.
La suma de lo que ya estoy acostumbrada y muchas veces descuido con el afán de lograr mis otras metas.
El presente es lo único que tenemos...
Tomémenos el tiempo de disfrutarlo con todos los sentidos...
Buen fin de semana.

10 de diciembre de 2009

...

Comienzo por pensar, asumir y admitir que éste, fue un año muy particular en mi vida.
Sucedieron grandes cosas, acontencimientos inesperados y sin embargo muy buscados a lo largo de un trayecto que muchas veces parecía desviarse sin rumbo alguno...
Y las emociones, están a flor de piel...
De pies a cabeza.
Por momentos, pienso que la edad me está haciendo cada vez más llorona, o saco cuentas para ver en qué período del ciclo hormonal me encuentro para darle una razón a este estado de ánimo casi indescriptible...
Y puede que sea todo junto y a la vez no sea nada de eso.
Que sea un poco de cada cosa, por el afán de no quedarme con una única variable posible.
Y si le sumo el agotamiento físico y mental, da como resultado lo que exactamente padezco en este momento, una angustia indefinida, sin nombre, ni religión; sin principio y hasta ahora, sin fin.
Tomé un vaso de coca con mucho gas, pero todavía no funcionó.
Apuesto a una caminata lenta por las veredas de Palermo, un heladito de cereza como recompensa de algo que aún no sé qué es, pero está en proceso de pérdida...
Y antes de volver a casa, un final.

9 de diciembre de 2009

Buena suerte

El feriado tuvo olorcito a verano.
Volvió a salir el sol y le dio la suficiente calidez a las callecitas de mi barrio, para que la gente se atreviera a pasear y hacer las compras en ojotas, desde temprano.
Y mientras caminaba al ritmo que me caracteriza, empecé a hacer una lista de la buena suerte, una especie de collage sobre las cosas lindas, sanas por las cuales tengo que agradecer la sonrisa cotidiana.
Sería algo así:
  • Tengo una familia que se la banca...
  • Tengo amigas que me bancan...
  • Tengo ahijado y sobrinos que me hacen reír...
  • Y los que están por venir, ya me roban una sonrisa
  • Vivo en una casa que me encanta
  • Trabajo de mi vocación
  • Mi mascota es feliz
  • Tengo proyectos que me permiten soñar
  • Sé cocinar
  • No sé bordar
  • Y sé abrir la puerta para ir a jugar

Pongan en práctica hacer una lista de la buena suerte de vez en cuando... les aseguro que da buena suerte!!

8 de diciembre de 2009

El retorno del hombre sin rostro

Volví a despertarme 6:02 a.m.
El hombre hasta ahora desconocido insiste en aparecerse en mis sueños y otra vez algo se interpone entre nosotros que me impide ver su rostro.
Está nuevamente en su auto grande, negro y lujoso...
Saca su brazo izquierdo por la ventanilla y me hace un gesto para que me acerque...
Voy hacia él para subirme a su lado, pero cuanto más camino, más me alejo.
Mientras tanto, él sigue mirándome con una sonrisa tierna... y ahí es cuando me despierto.
Hago el esfuerzo para dormirme otra vez y continuar la secuencia, pero la luz de su sonrisa me abre los ojos para disfrutarlo y regocijarme con todos los sentidos de la conciencia.
Hasta el momento no logro interpretarlo. Es borroso, difuso y bastante disociado.
Y sin embargo, me encanta despertarme con la ilusión de que el hombre de mi sueño se pueda convertir en realidad...
Todos tenemos las alas marcadas, todos tenemos la ilusión y reírnos con ganas...
Porque todos buscamos amor...

7 de diciembre de 2009

Qué sabés de mí

Después de una semana a puro festejo y despedidas, retomar los apuntes de la facultad fue una verdadera tortura china.
Me di palabras de aliento para no debilitarme y caer en la tentación de echarme en el sommier a mirar todo y nada en la tele, con un tazón de café con leche y bizcochos... porque encima, el clima del fin de semana fue ideal para eso.
Y entre las teorías de planificación, cuadros estratégicos y variables a tomar en cuenta para el análisis de una fuerza competitiva, reviví las cientos de imágenes y palabras vividas durante los últimos días...
Desde miradas casuales cargadas de intención, de esas que desprenden las chispas de luz válidas para encender el ON de la imaginación... atravesando por cataratas de carcajadas que brotan de la nada misma y me hacen eco en el corazón... sin olvidarme de las confesiones entre varias copas de vino que nos permitieron sentirnos más livianas y con la mirada aún más transparente...
Y eso es lo que tienen de bueno las amigas, porque tenerlas es una bendición del universo y serlo, un compromiso que particularmente me fortalece el alma y me otorga la energía necesaria para atravesar situaciones inesperadas...
Son la familia que elijo por elección propia, para que me acompañen en este camino que a veces, sola, me parece más difícil de transitar y permanecer...
Después de todo, quién sos vos y quién soy yo, si no podemos compartir "la carga..."
Tenemos mucho por dar...
Que se repita pronto!

4 de diciembre de 2009

Piedra libre!!

Volvió el sol!!! Qué placer, mezclado con el vientito fresco, que no se parece nada a las tardes de diciembre...
Estuve paseando por mi barrio, miré vidrieras, pagué cuentas y volví a casa para tomarme el último solcito que da en el patio de adelante.
Y durante casi todo el recorrido estuve tarareando la estrofa de una canción de Cerati, que dice así:
Y cuando sientas la necesidad...
merodeando en zonas de placer,
Súbete a los excesos de este amor,
y tal vez seamos la revelación...
La canto y no puedo evitar sonreirme.
Me imagino tantas cosas cantando esta canción!
Hasta me veo haciendo coreografía y todo...
El paseo y la falta de sueño, me influyeron... y por suerte de una manera divertida.
Reir me queda bien... así que me entreno para esta noche, que por supuesto, sigo despidiendo el año...
Buen fin de semana!

No hay dos sin tres

Ya empecé a despedir el año con mi gente... y todavía faltan veinte largos días para que termine el mes...
Nos juntamos a cenar o a tomar la leche...
Que sushi, que mejor asado...
Que un blanco cosecha tardía, que mejor otra cerveza para preparar una picada...
Y terminamos con un cafecito y un pedazo de pan dulce casero.
Ya van dos días que me acuesto a cualquier hora y con un considerado grado de alcohol en sangre... pero me divierto. Vivo y lo celebro.
Mis amigas me reconfortan el alma y ejercito cada músculo olvidado de la cara con las carcajadas simultáneas entre frases, anécdotas y planes.
Y otra copa. Y otro brindis con la mano izquierda, mirándonos a los ojos para atraer los buenos augurios.
Es tiempo de abrazos, sonrisas y miradas intentando encontrarse...
Es tiempo de fiestas.
A celebrar!!

2 de diciembre de 2009

Ganar Ganar

Estoy inundada de sueños... de anhelos, deseos, fantasías e ilusiones que los acompañan para que no se sientan tan solos en la lucha... Me animo a darles una jerarquía, un orden para ponerme en la marcha de juntarlos con la realidad
Y creo que ese debe ser el motor de la vida de muchos... Lo es el de la mía: soñar con alcanzar una meta, mi meta.
Jugarme las fichas en algo diferente para lograr que esa fantasía se cumpla... para que la rutina no me aplaste y mi mirada conserve la luz que transmita el único brillo genuino que sabe conquistar...
Y si es correcto o no, lo sabré sólo al momento de encontrarme plenamente sumergida en las profundidades de este maravilloso océano que es la vida, con las corrientes y torbellinos que desata para volver otra vez a reencontrarse con la calma del corazón.
Y aunque sepa la teoría, dudo y cuestiono si mis decisiones son las acertadas.
El movimiento de la lucha generó mucha energía a mi alrededor... La percibo todos los días cuando me doy cuenta que me siento un poco más plena, hinchada de felicidad por cultivar esas semillas que, el día menos pensado y el más esperado, darán los frutos que soñé desde un principio.
Entonces respiro profundo y me doy el permiso para seguir condimentando cada ilusión con un aroma y sabor diferentes...
Me equivoco, me revelo, me escondo y me descubro a diario, con la frecuencia movilizadora de la inercia de la respiración y el movimiento...
Examino mi corazón, y me tomo un breve descanso cuando la respuesta es positiva para empezar a entrenarme de nuevo... con el único y gran objetivo de GANAR, siempre GANAR.
Apuesto a que un día cualquiera, en un lugar incierto esta persistencia será recompensada.

1 de diciembre de 2009

Amores que matan nunca mueren...

Eso dice el célebre cantautor Joaquín Sabina...
Y pensándolo bien, no es sólo una frase bonita para una excelente canción...
Parte de una poesía que se me viene a la mente justo cuando me encuentro frente a situaciones que vuelven, retornan, como una ola en el mar...
Sube la marea y de golpe, con sorpresa, aparece una corriente imprevisible e involuntaria aún después de tantos caminos andados...
Me intereso en analizar particularmente, cómo ese amor y esa pasión que formaba parte de nuestra historia, logra reaparecer a pesar de las peripecias y vicisitudes de la vida, casi con la misma frescura del comienzo.
Pienso en cómo un llamado telefónico y un parpadeo naranja en la ventana de un chat junto a un hola con signo de admiración, logra rebrotarnos una sonrisa inesperada, impensanda e inadvertida, y no hacemos otra cosa más que vivir gracias a esa expresión de alegría que parece convertirse en nuestro ¿nuevo? combustible cotidiano...
¿Será que la vida nos sorprende?
¿O será que las historias que creíamos terminadas vuelven porque aún tienen respuestas inconclusas?
¿Y cómo fue que logramos olvidarnos de todo lo que alguna vez nos separó de aquél amor (más allá de unos cuantos miles de kilómetros) para intentar retomar, al menos, el diálogo?
¿Será que la heridas ya cicatrizaron? ¿O que nos encontramos frente al momento en el que al fin estamos en condiciones emocionales para escuchar aquéllas respuestas que en un tiempo pasado nos hubieran roto (más) el alma?
¿Cuán fuerte es este amor para hacernos soñar otra vez con un eventual aunque incierto futuro?
¿Será por eso que este amor matador de Sabina, que valió sangre, sudor y lágrimas se queda revoloteando en algún rincón de nuestro corazón, preparado para volver a encender la llama cuando lo requiera? ¿O no es así tan fácil?
¿Es debilidad? ¿Costumbre? ¿Pasión? ¿Volver a arriesgarnos? ¿Abandonar el camino nuevo?
¿O amor verdadero?
El único argumento válido, lo tiene nuestro corazón.
Aprendamos a escucharlo y encontremos la respuesta.
Te quiero amiga!!

30 de noviembre de 2009

La vida te entrena

El fin de semana fue un placer.
Arranqué el jueves.
Este es un breve resumen:
  • Horas de sueño: muchas, siestas incluídas.
  • Estudio: 0
  • Visita al centro de Belleza: sábado a la tarde
  • Comidas ricas: viernes y domingo
  • Cervezas: unas cuantas
  • Planificación estival: domingo
  • Salidas: 0
  • Reuniones con amigos: jueves
  • Zapping TV: suficiente
  • Sueño con el hombre incóginta: madrugada del domingo, con la tormenta de truenos y ruido a lluvia cayendo a cántaros de fondo. Hasta parece romántico.

Comienzo la semana con una gran sonrisa y repleta de energía. El entrenamiento justo y necesario para afrontar el último mes del año.

27 de noviembre de 2009

Anticipo 2010

Parece ser que los sueños anticipan, anuncian, preparan y avisan... De algo, lo que sea que nuestro inconsciente no se sienta a gusto... O tal vez de los anhelos latentes que de alguna manera se las ingenian para volverse visibles...
Lo importante es lograr descubrirlo o al menos, darle los primeros anticipos para una interpretación válida y por sobre todas las cosas, coherente...
Despertarme durante tres días una hora antes de ir a trabajar, no fue casualidad...
En principio, supone una señal para abrir los ojos, agudizar los sentidos y nadar contra la corriente si fuera necesario...
El trabajo ya me despabiló y me despertó hacia una importante parte de mi vida...
Sin embargo, espero más...
Por lo pronto, ya tenemos pasajes a La Feliz para celebrar Año Nuevo en compañía de amigas y buenos deseos... para compartir esperanza común de que el 2010 comience cargado con la energía del mar y poder contrarrestar los sabores amargos de los últimos meses...
Abrir los ojos y mantenerse despierta...
Esa es la señal...
Buen fin de semana!

26 de noviembre de 2009

Primer dato

6:03 a.m. Un minuto más tarde que las mañanas anteriores.
Y una hora antes de la que debería levantarme para ir trabajar.
Rápidamente recuerdo al hombre de mi sueño.
Recuerdo más objetos y algunas imágenes revolotean por mi conciencia.
Me esfuerzo para volverme a dormir y continuar el sueño, a la vez que intento permanecer despierta para no olvidar detalles.
Esta vez hay un auto, negro, grande y bastante ostentoso.
No soy entendida en modelos automovilísticos, pero estoy segura que ni se aproxima al anhelado Twingo.
El hombre está manejando ese auto negro y claramente se acerca hacia mí.
Yo estoy frente a él, en una especie de callecita con adoquines y casitas bajas.
Me sonrío cuando lo veo venir. Un claro síntoma de felicidad por su presencia.
Pero el reflejo del sol no me deja ver por el vidrio del parabrisas con facilidad y una vez más, su rostro se camufla y no puedo reconocerlo.
Y ahí es cuando me despierto. Justo un minuto después que la mañana anterior.
Este sueño me intriga. Hacía años que no soñaba de manera tan recurrente.
Pienso despierta y hasta el momento no conozco a nadie con semejante auto.
Mientras tanto, espero ansiosa que llegue la noche y presto atención en cada esquina.

25 de noviembre de 2009

Soñar no cuesta nada...

Hace dos noches que sueño con el mismo hombre. Un desconocido. O al menos lo es en mi conciencia. No logro recordar su cara nítidamente.
Sólo me habla, me hace reír como loca y no para de mirarme todo el tiempo.
Una mirada que me intimida y que sin embargo me seduce hasta el punto de quedarme muda, y con cara de fan enamorada.
Y esas dos noches continuas que me despierto exactamente a las 6:02 a.m.
Se me ocurren algunas hipótesis.
Confío en el imaginario y apuesto a mis creencias.
Pululan datos que podrían estar conjeturándose en el espacio que me permiten espiar de qué se trata, al menos de madrugada.
De paso, sigo condimentando los días con imágenes de ensueño y deseos de realidad para que el hombre de mis sueños aparezca a la vuelta de la esquina.

24 de noviembre de 2009

¿Climaterio?

¿Hasta cuándo el clima planea ser más ciclotímico que yo? Me superó y su diagnóstico es bipolar y reservado.
En el transcurso de una hora sale el sol, llueve a cántaros, el viento te vuela los pelos que para esa altura ya no soportan la crema anti-frizz de la noche anterior y por si todo fuera poco, transpirás como oso polar en la selva tropical.
¿Será que la evolución de la especie nos está convirtiendo en seres humanos anfibios?
Entonces, ¿para cuándo las membranas interdigitales?
Si esto sigue así, voy a rever las posibilidades de nuevos cortes de pelo, alisados permanentes o un asumido african-look en versión rubia.
Por lo pronto, hago buen uso de mi versatilidad geminiana y me adapto a los cambios.
Incluso a los climáticos.

23 de noviembre de 2009

Final countdown

Cuando la cuenta regresiva es la herramienta más consultada durante el día, se complica la espontaneidad y la rutina parece estirarse como un chicle pegado en el asfalto.
En estas semanas se termina todo: facultad, escuela, reuniones, parciales y finales.
Y sin embargo la vida continuará, con una vuelta de hoja más escrita para el libro de mi vida.
Comienzo a planificar, tímidamente, mis días de verano.
Huelo algunos días con mar, otros con jardín, pileta y reposeras; libros y películas hasta altas horas de la madrugada, además de unas ricas y frías cervecitas con amigos.
Sospecho sorpresas, nuevas sensaciones y esperados descubrimientos.
Mientras tanto, cenas con amigas, tardes de mates y paseos, viajes fugaces y ansiados recitales.
Comienzo a contar para atrás, como un cangrejo.
Lento y sin prisa.
Para llegar con todas las luces al destino que me permitirá descubrir todo lo bueno que me espera.

20 de noviembre de 2009

Lo que el viento NO se llevó...

Después del secuestro del marciano chupatierra, vuelvo al ruedo... O por lo menos a intentarlo...
La humedad de estos días hizo corto circuito en mi cabeza, y entre parciales, clases, reuniones, actos escolares y muestras de arte... recordé que estoy viva y que dar un respiro profundo conscientemente es más que necesario...
En busca del más genuino e indiscutible sentimiento de amor incondicional, me refugié en la casita de Ranelagh para pensar en voz alta y reordenar pensamientos junto a mis primas...
Logramos un almuerzo de cuatro mujeres compartiendo nuestras vidas y por un largo momento me olvidé de los próximos compromisos semanales...
Sumado al cariño de mi "sobri maravilla", sin dudas que reviví.
Estoy preparada para enfrentarme a la realidad que me espera...
Recargué las pilas y renové la energía...
Falta poco...
Y epero que sea lo mejor!

13 de noviembre de 2009

Buenas señales

Salir a caminar y encontrarme con el mundo en el que vivo, me hace estar atenta de señales que muchas veces me parecen cotidianas.
Me parece que esto de visualizar positivo las cosas que deseo e imaginarme que las estoy viviendo en su etapa inicial, realmente no es un verso...

Hoy conté la cantidad de Twingo que me crucé en seis cuadras a la redonda: 15 ¿Acaso hay muchos más en Buenos Aires?
A esto le sumamos decenas de parejas felices caminando de la mano, mujeres acompañadas de sus hijos pequeños paseando sin prisa ni apuro, rondas femeninas compartiendo la merienda, madres e hijas poniendo en común sus diferencias generacionales, y pequeñas pero armoniosas casas de té decoradas con diferentes y exquisitos estilos
Todo el entorno me habla...
Me muestra que las cosas que deseo existen y son posibles de concretar...
Me anuncia que debo prestar más atención en encontrar y concentrar la energía para lograrlas...
Así y todo, ese no sería el fin...
Siempre lo renuevo para seguir encontrando nuevos medios que me colmen de sabiduría y gratificación...
Hoy es viernes!
Qué buena señal!

12 de noviembre de 2009

Ampliando redes

Durante mis charlas con amigas, coincidimos que ampliar las redes sociales y salir de la cucha sería como un buen comienzo del plan para conocer gente...
A otra gente. Diferentes personas. Discursos distintos a los nuestros, puntos de vista desde otra óptica, experiencias diversas frente a una misma situación...
¿Para qué?
Para crecer, para relacionarnos, darnos a conocer, escuchar, observar, compartir y aprender.


Hace algunos años inicié las "Reuniones de Nenas" donde a la idea de invitar a cenar a mis amigas de siempre, se le sumaban sus amigas para sí lograr extender mente, voces y oídos...
La idea gustó y perseveró el tiempo suficiente para ensanchar nuestra energía y vitalidad.
Realmente el que tenía que ser.
Con esto pienso otra vez en esta teoría de que renovar los lazos nos sirve para valorar más los que tenemos y tener la solidez necesaria para conservarlos y merecerlos...
Porque pareciera que resulta algo problemático hacerlo sin roces en estos tiempos de vacas flacas...
Llega el fin de semana.
Tiremos las redes.
En una de esas... elevamos nuestro espíritu.

11 de noviembre de 2009

No te pienso atender

A ver si después de meses de llantos, intentando encontrar respuestas a su ausencia, queriendo olvidar palabras, imágenes, perfumes, sabores, abrazos y caricias...
Si después de que me haya faltado el respeto, roto la confianza, quitado la respiración y mutilado la esperanza...
Pensará que aún después de haber pasado tanta agua bajo el puente, yo soy la misma que él conoció y pretende que lo atienda por teléfono para charlar... ¿de qué?
¿QUÉ QUIERE? Así en mayúsculas, transformando mi cara en una síntesis de desenfreno e ironía...
Acaso querrá que vuelva a escuchar sus interminables charlas llenas de dilemas y crisis existenciales? ¿O será que volvió a separarse y está roto en mil pedazos, entonces otra vez quiere que lo ayude a juntar las piezas de su rompecabezas para cuando esté acomodado y ordenado me de las gracias a través de un simple y miserable e-mail y se vaya por la misma puerta por la que entró a compartir su felicidad con una mujer que, por supuesto, no soy yo?

¡CHOTO! Andá a terapia, que para eso tantas personas estudian año tras año y se reciben de psicólogos. O comprate un perro y sacalo a pasear.
Escribí un libro, plantá un árbol o tené otro hijo.
Hacé un viaje sin pasaje de vuelta.
O simplemente dejame de hinchar las pelotas!!!!!

Que se haga cargo y que no pida piedad.
Que asuma las consecuencias. Y que recoja él solito su propia siembra.
Esta vez elijo yo.
Que se entere.

10 de noviembre de 2009

Balances

Es una costumbre en mí, que todos los noviembres mi cabeza empiece a conjeturar y ordenar el balance de fin de año. En realidad, es el segundo, porque para la época de mi cumpleaños tuve el primero, si tengo en cuenta que mi año comienza desde el día que nací.

Con los años renuevo las variables, teniendo en cuenta la evolución y el vital crecimiento.
Amor, trabajo, salud, logros personales, logros profesionales, convivencia, diversión, familia, amigos, estabilidad emocional y dinero.
Casi como en una matriz de análisis estratégico, me juego a decir que el saldo de este balance es positivo.
Y es hacia ese lado al cual debería inclinarme para que realmente sea un balance con pendulación estable a nivel interno, o algo así.
Quiero decir, no concentrarme en lo negativo, en lo que faltó, lo que no funcionó, lo que restó o en lo que ni siquiera se aproximó a ser...
Tampoco olvidarlo. Mucho menos negarlo.
Asumir, que no es cosa fácil, y tenerlos en cuenta para evaluarlos y ocuparme de ellos cuando lo requieran con la energía que demande. Ni más, ni menos.
Y entonces así dedicarme a celebrar y agradecer lo hecho, dicho, experimentado, aprendido, disfrutado, acordado y resultado.
En estos días es cuando me queda afinar el ojo para concentrar las fuerzas en lo que queda, y poder comenzar a pensar en aquellos proyectos que quisiera componer durante el próximo año.
Pocos, pero significativos y concretos.
Felicidad, empieza con FÉ.

9 de noviembre de 2009

Ausente con aviso

Si estos días no mencioné a los ojitos de cielo de Hernán, a continuación comprenderán que fue porque realmente el horno no estaba para bollos...
Después de tardes compartidas entre cafecitos y helados, paseos, comida china, unas buenas pelis sin lograr llegar al final tirados en el futón de su monoambiente "palermeño", el administrador de empresas pidió cambio al referí... En criollo: dar un paso al costado...
Arrancó con que no estaba seguro de lo que estaba eligiendo para su vida...
Que por lo pronto prefería no iniciar ninguna relación seria (hizo el gesto de comillas con los dedos) en ese estado de confusión...
Que yo era divina... cariñosa, compañera y divertida... pero que evidentemente el del problema era él... Faltaba que citase la frase "no sos vos, soy yo" y era para cantar BINGO colgada de la ventana del 5º piso y en cinco idiomas!
Y mientras él seguía enumerando cuestiones que para entonces ya le había perdido el hilo conductor, agrega... que además (de todo lo mencionado antes, por supuesto) lo había llamado la ex novia por un trámite inconcluso y que se habían encontrado para hacer el cambio de nombres en las facturas del celular y que..............................................................................................
A partir de ahí, ya no escuché más nada.
Ya me había mareado, perdido y aburrido de tantas vueltas.
Figurita repetida. Cartón lleno. Sin chance a reciclar.
Por mi parte fui sincera, concreta y terminante: que todo dura lo suficiente para dejarnos una experiencia, anécdota y aprendizaje...
Que yo simplemente deseo estar dentro de las opciones de otro y formar parte de su elección por el sólo y único placer de estar juntos... sin títulos, explicaciones ni peros...
Que si no va, no va...
Y que tenga buena suerte en el ballotage con su ex...
Qué poco duró el bombón esta vez... Aunque lo disfruté, para qué negarlo...
Por lo pronto, borrón y cuenta nueva. Otra página en blanco para comenzar a escribir historia diferente. Sigo en el camino... y mirando para adelante...
Para, quizás, volver a encontrarme con la espontaneidad y la frescura de lo nuevo...
Sin títulos ni preámbulos.
Simplemente nuevo.

7 de noviembre de 2009

De cepas y otros brevajes

Una invitación a la que no pude resistirme: degustación de vinos de lujo en el Hotel Alvear.
Después de una siestita reconforatodora, me emperifollé para combartir la garúa de las 6 de la tarde y me fui en busca de nuevos aromas, colores y sabores.
En la variedad, está el gusto.
Y es cierto.
Compartí entre amigos una exquisita velada teñida de rojos intensos, espumantes atrevidos y ruidos de chinchines...
Risas, anécdotas, miradas, secretos y brindis por todo eso y mucho más.
El fin de semana empezaba con buenas nuevas.
Enloquecí de la risa, como hacía tiempo no me sucedía.
Reconozco que las burbujas color caramelo hicieron bien su trabajo...
Mis ojos brillaron y mi sonrisa se lució...
Parece que nada sucede en vano.
Y que después de la tormenta, siempre sale el sol...
¡Bienvenido!

5 de noviembre de 2009

Llorar hace bien

Es comprobado que después de la risa, llegan las lágrimas. A veces de emoción, ilusión, sorpresa y ataque de tentación con amigas. Y también es cierto que después de un buen llanto, estamos en condiciones de empezar a sonreír otra vez.
El jueves llorar en el diván me limpió bastante las ideas, me aclaró el panorama...
Logré sacar afuera todas esas cosas que me estuvieron dando vuelta en la cabeza cual fantasmas estos últimos días.
Las descubrí. Les hice frente.
Cambiar de piel como una iguana. O de color según la ocasión como el caimán, con el único propósito de evolucionar y crecer.
Porque crecer duele. No importa la edad.
Ahora, tengo todas las cartas sobre la mesa y depende sólo de mí elegir qué estrategia usar para hacer el mejor juego. Para intentar sentirme segura y orgullosa de cada movimiento hecho por propia elección.
Para saltar, hay que soltar.
Estoy en eso.

Alcanza tu meta

La búsqueda tiene un secreto: es para aquéllos que possen el coraje de no darse por vencidos, de perserverar en sus intentos.
La paciencia es una virtud y tiene su recompensa. Sólo es cuestión de saber esperar.
Desde ahora y en adelante, voy a inventarme el final de cada historia.

3 de noviembre de 2009

Recomendaciones médicas

Un dolor de espalda imposible de calmar con calmantes de venta libre y duchas de agua caliente dirigidas a la zona del dolor, dio lugar a que consulte al médico.
Después de la clase facultativa, me fui directo a la guardia del Otamendi.
Unos cuantos minutos de espera y el único entretenimiento posible de hacer en una guardia médica, fue adivinar qué le pasaba a las otras personas que ahí estaban. Un sinfín de caras y cuadros por descifrar... Y a eso también le sumé la chance de imaginar estado civil, cantidad de desamores, profesiones y pensamientos...
Todo lo posible para intentar olividar ese dolor lumbar que pretendía dejarme al borde de la inmovilidad y con la cara de Andrea Del Boca interpretando su rol protagónico en "Celeste siempre Celeste", en el momento en el que había perdido la memoria...
La gente pasaba, entraba y salía del consultorio con una rapidez opuesta a la habitual...
Una de dos: no tenían nada grave o el profesional de la medicina era un completo desentendido en los temas llevados por los pacientes.
De todos modos, no me importaba. Era sólo algo más para pensar e intentar disuadir el dolor. Quería que mi turno llegara lo antes posible, obtener la receta para comprar los calmantes aptos para caballos e irme pronto a mi dulce hogar...
Entre fantasías, pensamientos y ensueñosescucho mi nombre en el altavoz indicándome pasar por el consultorio siete.
Recorro los pasillos y encuentro la puerta anunciada.
Golpeo, pido permiso y entro.
El joven médico sentado del otro lado del escritorio, habló sin mirarme: recostate boca abajo en la camilla y bajate el pantalón a la altura de la cola.
Un urgueteo meramente profesional en la zona afectada, algunas preguntas de rutina y otra vez sentado detrás de su escritorio escribiendo en un papel.
Vas a comprarte estas pastillas, las tomás cada ocho horas con el estómago lleno porque son fuertes y con esto se te debería pasar... De todos modos no olvides ejercitar con moderación la zona... ¡¡¡Con sexo te alcanza!!!
Increíble los avances de la medicina en los últimos años.
Hoy a la noche, me tomo un cafecito con Hernán.

Todo pasa... ¿y qué queda?

Lunes alunado.
Húmedo, gris y con frizz en el pelo.
Después de darle algunas vueltas al asunto, interpretar estados de ánimo confusos, analizar bajo la ducha mis caras de ortito durante las últimas 48 hs., resolví que me harté de estar sola...
Y me río de mí misma... porque me pregunto: ¿Y? ¿Qué vas a hacer si te cansaste de tu soltería? ¿Te vas a agarrar el primer chongo que pase por la puerta de tu casa? Ja!! Como si encima pasaran muchos, no??!!! ¿O mejor ponés un aviso en el diario que diga MUJER SOLTERA BUSCA? ¿O te suscribís a páginas de citas? UUUFFF!!!!
No, la verdad es que no sé qué hacer todavía... Si es que hay algo de todo lo pensado que realmente valga la pena...
Lo positivo es que manifiesto abiertamente qué me pasa, qué siento y cuánto me hincha los ovarios la situación presente...
Por lo pronto intentaré cambiar la energía con todas las herramientas que estén a mi alcance, sin estar pendiente del tema las 24 hs. del día...
Será una cuestión de horas, quizás días...
Quién sabe.
Todo llega... ¿pero cuánto falta?

1 de noviembre de 2009

Treak or Treat?

No sé si es el período del mes en el que me encuentro, donde las hormonas juegan un rol extraño presionando la sensibilidad, la lluvia cesante desde la mañana temprano, nulidad de planes divertidos, sobrecarga de estudio, excesos de trabajos prácticos y lecturas bibliográficas o nada más y nada menos que la sumatoria de todas estas cuestiones juntas... Cosa que no es poco.
Un sábado sensible, emotivo, cargado e introspectivo.
Preguntas difíciles de responder en una escena como la presente, cuando de momento nada me parece suficiente o quisiera que algunas de las cosas que más deseo, esas que nacen desde lo más profundo de mi alma, se resuelvan como por arte de magia...
Cuando la vida de las otras personas parece transcurrir y fluir a un ritmo parejo y armonizado... que me llevan a comparaciones innecesarias pero inevitables...
Hoy es cuando me hacen falta esos abrazos, mimos y palabras dulces... Cuando la tarde sepia me resulta interminable y la noche sin estrellas ni luna, me recibe vacía de planes, lejana de consejos y desprovistas de celebraciones compartidas...
Y me pregunto cómo logro armonizar el presente sin tener la mirada invasiva y desafiante del futuro... Cómo hago la excepción de romper las reglas, intentando vivir en el reencuentro permanente conmigo misma, con mi propia esencia y hacer que los mecanismos de ilusión encajen con exactitud y presción con las situaciones reales que puedo vivir...
Estos son los días en que, por un instante que parece eterno, la soledad, soberbia y altanera, revolotea por mi casa con ganas de debilitarme y jugar una pulseada despareja...
Donde con esfuerzo y sin resignación evoco la lucha de tantos años para mostrarle cómo logré sobrellevarla, con dignidad y orgullo... pero sobre todo con sentido común.
Parezco confusa. Y es que así estoy.
Sábado a la noche con lluvia.
Dormirme es la opción más afín para dejar de pensar.
Mañana será otro día.

30 de octubre de 2009

Hay que salir al recreo...

Reconozco, aunque aborrezca el verano, que los días de "calorcito" ameritan para más reuniones, salidas, encuentros y un permiso para dormirnos algunas horas más tarde aunque al día siguiente tengamos que seguir madrugando...
Habrá que encontrar pretextos dignos y sin culpas para concretar escapaditas espontáneas o planeadas, con amigas o solas... al solcito o al cine, en un jardín con árboles o en una terracita con macetas...
Regocijarse, respirar profundo, deleitarse y aprovechar cada momento...
Atreverse a las emociones, encarar nuestros desafíos, competir a capa y espada con la cómoda mediocridad...
Voy a inventar una feria del placer para vivir esta vida que construyo todos los dias con la balanza a favor del lado positivo....
La decisión la tengo yo y por eso puedo elegir libremente el camino...
Voy a abrir los cajones para ventilar los pensamientos y gestar nuevos recuerdos...
Sonó la campana...
Voy a salir al recreo...
¡¡Ya es viernes!!

29 de octubre de 2009

Causa y efecto

Las casualidades no existen y a esta altura de mi vida, ya lo tengo más que aprendido e incorporado... Lo cual no significa que siempre esté preparada para enfrentar ciertas situaciones, sobre todo cuado son sorpresas que trascienden mis expectativas.
Afortunadamente soy una geminiana versátil, con marcada tendencia a la improvisación...
Y hoy cambié la clase en la facu por un helado con Hernán.
Así de sopetón, natural y a la luz del día.
Nos encontramos en la esquina de una plaza y caminamos un rato largo por las calles de su barrio... A ritmo lento y pausado y tranquilos, sin horarios...
Miramos vidrieras, criticamos la moda impuesta y nos endeudamos a diez años de sólo mirar los precios de esos diseños exclusivos hechos para gente especial.
Logramos construir momentos únicos, inventamos nuestras risas, miradas y gestos cómplices.
Nos observamos y nos contemplamos de cerca...
Intimidada por esa mirada celeste que parece desbordar palabras que su boca no se anima a decir, me sentí otra vez auténtica, libre y sencilla. Sin vueltas.
Hoy volví a convencerme de que los momentos se confabulan y enganchan unos con otros para que sucedan cosas mágicas, reales y libres.
No hay temor. Hay futuro

28 de octubre de 2009

En las buenas y en las malas

El fin de semana propició para preguntarme nuevamente, si existe algún límite certero entre la hermandad y la amistad; en cuándo mis amigas comenzaron a ser parte de mi familia de la manera más espontánea y natural; en qué momento me atreví a considerarlas una extensión de mis sentimientos, pensamientos, sueños y experiencias... en cuándo la fraternidad sincera, franca y genuina, decide trascender las fronteras sanguíneas dejando de lado las muestras de ADN para convertirse en la extrema necesidad de sociabilización compartida desde lo más profundo de mi ser...
Y más preguntas rebotando entre mis pensamientos vacilantes, sobre qué sería de esta geminiana sin la presencia (o ausencia) de estas amigas mías, de todas y cada una de ellas: las elegidas día tras día, las que pasaron y dejaron su huella, las que perduran a través de los años, las reelegidas y las que impuestas, pero aceptadas, por una visión familiar convertida en tradición compartida de "ser todas iguales".
Estoy convencida que todos los días soy un poco mejor gracias a ellas, porque me escuchan, me apoyan y sugieren sus ideas con el único interés de verme feliz... Porque actúan y razonan con críticas constructivas para sumar... porque analizamos, compartimos, debatimos y sacamos nuestras propias conclusiones sobre la vida que queremos vivir... Y porque simplemente nos damos el placer de compartir nuestros días, con el único propósito de seguir creciendo juntas.
No existen hijas únicas cuando florecen amigas como las mías.
Hoy declaro que hermanas, primas y amigas son sinónimos aliados entre sí para hacerme cada día más feliz.
AMIGAS: Gracias por dejarme compartir la vida junto a ustedes...

26 de octubre de 2009

Que sea lo que sea...

Esto de hacer citas con "extraños" es una situación a la que no logro acostumbrarme, a pesar de haber vivido algunas experiencias similares... Y sobre todo cuando se trata de estas citas a ciegas, que más allá de conversaciones por chat o telefónicas previas al encuentro, suelen dejar una puerta más abierta que de costumbre a la incertidumbre, sin olvidar el temor de querer ser lo más natural y espontánea posible, no sólo para gustarle al otro, sino para adicionar calma y comodidad a esta situación especial y curiosa.

Intenté que la noche transcurriera amena, ligera y desabotonada para no quedarme enroscada con detalles que aparentan ser minuciosos y críticos pero que son los que me convocan a mayor análisis.

El lugar elegido por Hernán "ojos de cielo" para cenar juntos fue Palitos, un restaurant del Barrio Chino, donde fuimos recibidos con una extensa e interesante carta de comida tradicional. Vamos a tener que aprender a hablar chino, fue uno de sus primeros comentarios mientras nos ibamos sentando en la mesa llena de frasquitos colmados de sabores asiáticos. Ordenamos un picadito de platos para probar de todo un poco y lo acompañamos con un rico vino tinto... Los camareros no le ponian voluntad a su trabajo, así que hicimos algunos chistes como para darle un poco más de soltura a esos primeros minutos de estar sentados frente a frente. Porque hasta que llegaron los platos, parecíamos trabados y nerviosos... hasta que en un momento que no recuerdo cuál, las palabras comenzaron a fluir con gran facilidad.

Me contó sobre alguno de sus viajes, sus mudanzas por diferentes provincias cuando era chico, un "casi casamiento" hace dos años atrás y su temor convertido en fobia por las arañas... Me pareció cortés, educado, con modos agradables para comer. Tiene un humor particular y es bastante impredecible...
Yo hablé de mi profesión, de mi paión por la cocina, algunos bocetos de proyectos personales y las posibles vacaciones al Norte junto a las chicas. Lo más importante, es que fui auténtica: me reí con mi risa, lo miré con mis ojos de siempre, hablé con mi estilo y no mantuve ninguna postura estratégica o de manual.
Cuando quisimos acordar ya eran cerca de las 4 de la mañana. En ese momento me acordé que cuando nos íbamos de vacaciones con mi papá, él siempre me decía que si me dormía en el auto llegábamos más rápido a destino... Pero afortunadamente no fue ese el caso... Ahora debería decirle yo a él que si te divertís tenés la sensación de que el tiempo fluye y por eso sentís que pasa más rápido... Y que en algunos casos, como esta cita, reírse y hablar sin parar es mucho mejor a dormir...
Llegué a casa con el cantar de los pajaritos del jardín, y mientras me sacaba el maquillaje, me miraba de reojo en el espejo y me reía sola recordando algunas situaciones.
Recién cuando estaba acostada con mis sabanitas recién lavadas, recordé que en toda la noche no me contó ningún secreto.
No importa.
Que sea lo que sea.

23 de octubre de 2009

Sabor a viernes...

Por fin llegó el viernes!!! Todavía no empezño y ya estoy esperando que llegue el de la semana próxima... No estoy segura de que sea mi día de la semana preferido, pero me huele a libertad, a paseo, ruido de cubiertos, gente y ricos aromas...

Y también a una cena... Claro, cómo olvidarme del programa con Hernán...

Anoche ultimamos detalles y quedó en pasarme a buscar por casa... Al principio no estaba convencida, me pareció demasiado formal para la primera salida... Pero nuevamente me relajé y me dejé llevar... Y si a él le pareció bien hacer ese recorrido, fantástico. Que así sea...

Quedamos a las 20:30, porque hay una reserva media hora más tarde en un restaurant que no me quiso decir más que "se come lo que a nosotros nos gusta"... Es que estuvimos hablando bastante acerca de nuestros gustos y preferencias culinarias. Le aclaré que no como nada de pollo, ni conejo, ciervo, pato y otros seres insospechados de maldad innecesarios de comer... Como para que no me vuelva a suceder lo de aquella salida con Eduardo: fue en la época que todavía era vegetariana, y el tema había sido comentario de varias charlas previas al encuentro e incluso de chistes... Pero parece que el Sr. No Sabía Escuchar, alias Me Importa Un Comino Lo que Digas, me invitó a comer a una parrilla de Mataderos...
La PA-RRI-LLA y la VE-GE-TA-RIA-NA, una combinación bastante extraña por no decir imposible. No tuve más opción que comer una triste pero crujiente provoleta acompañada por un tomate rociado con aceite, sal y orégano, mientras él, fascinado por la "buena elección" del lugar, hacía pedidos de achuras, costillares y adherezos hiper condimentados propios de las parrilladas... Fue la primera y última salida con Eduardo... Incompatibles, desde el arranque...
Así que espero que Hernán haya escuchado o mejor dicho leído sobre mis gustos... Al menos para que la velada sea lo más agradable posible, y con vistas a futuras si el resto de las cosas marchan bien...
Por mi parte creo estar con la actitud necesaria... Logré descansar unas horitas para estar con todos los sentidos despiertos y abiertos, y después de bañarme me encremé con una leche nutritiva a base de cholate blanco, apta para mordiscones... Mientras que intento calmar el sofocamiento que me produce este calor incontrolable, escucho la música de mi salmón favorito para cargarme de ritmo y creatividad...
Y sí, un poco nerviosa estoy... para qué negarlo.
Pero tengo gran sensación de libertad, plenitud y predisposición, cosa no menor al momento de concretar un encuentro con otra persona...
Mi deseo es poder transimitirlo y que sea bien percibido, al menos para escuchar atentamente cuál es el secreto que tiene para contarme...
Wish me luck!

Relajate... ya es jueves

Los jueves son días largos... Clases, reuniones, terapia, facultad... Me calma saber que sólo falta un día para que empiece el añorado fin de semana. Aunque de descanso cero, porque ya están todos los días programados con tareas. Lo más reconfortante es irme a dormir sin prograrmar el despertador tan temprano. Después de casi tres décadas de actividades matutinas, no logro madrugar felizmente, siempre me parece poco y por lo general lo primero que pienso cuando me levanto es en la hora en que volveré a dormirme. La época de secundaria fue tremenda!! Ni siquiera podía vestirme sola, me quedaba dormida en el baño y nunca alcanzaba a tomarme la taza entera con té con leche que me preparaba mi mamá. Odiaba a Magdalena con su tempranísimo para alentar a todos los niños que iban a la escuela cantándoles la canción del "Perro Salchicha"... No, no. A mí no me hacía más feliz escuchar canciones infantiles y alegres a esa hora... Sólo me daban ganas de clavarle una salchicha en la garganta para que no hablara más... Pobre Magdalena... Ella quería ponerle onda a la mañana, no? ja! Y mi vieja se ve que también... porque tarareaba la melodía al compás de la cucharita revolviendo el café... Y yo, seguía dormida con los ojos abiertos, como zombi... y con un humor, para el olvido.
Cuando hoy a las 6:45 a.m. sonó el despertador, no tenía ni a Magdalena saludando a los de las siete, ni a mi mamá con el té con leche y ni siquiera una divertida canción infantil para darles una nueva oportunidad a aquéllos amaneceres adolescentes.
Así que lo primero que pensé fue: relajate... que ya es jueves...
Pongalo en práctica. Funciona.

21 de octubre de 2009

Tarde despejada


Después de algunas horas de chat con Hernán, risas y mensajes de texto con saludos de buenos días, el día de hoy lo viví con el cielo más azul que nunca. ¿Habrá sido porque inevitablemente pensé casi todo el tiempo en sus ojos?

Los dos compartimos la pasión por la cocina, nos gustan las películas con "juicios" y los palitos de la selva. Vive en Palermo, hace una semana sopló 34 velitas y es Licenciado en Administración de Empresas. Trabaja en una consultora y es fanático del Rojo de Avellaneda.

Mi abuela me diría: "es un buen partido nena". Y la realidad es que esta cabecita geminiana ya se imaógin algunos planes juntos. Pero mejor, vayamos por partes, despacio, sin saltar etapas...

Porque Serrat canta que el "camino se hace al andar", hay que intentar vivir cada momento como único e irrepetible y disfrutarlo con todos los sentidos.

Por eso, hasta el viernes que concretemos el encuentro, concentaré la energía en nuestras charlas cibernéticas y los mensajes para alimentar con actitud y sin temores la cena con un extraño de ojos azules, que sigue teniendo un secreto para contarme.

No, no hubo caso. No logré persuadirlo para que me lo dijera por el MSN.

Paciencia. Lo mejor, siempre está por llegar.


20 de octubre de 2009

El secreto en sus ojos...

Por supuesto que no aguanté demasiado tiempo para conocer cuál era el secreto oculto que aquél muchacho que conocí en el colectivo quería contarme...
Así que después de dar ciento cuenta y cinco mil vueltas, decidí enviarle un mensaje de texto al número que escribió en una esquinita de hoja. La verdad que no sabía cómo encaralo, ni qué escribirle o si se iba a acordar de mí...
Quería escribir algo original, pero que no fuera cursi... Y como no soy amante de las estrategias a la hora de encontrarse naturalmente con la gente, escribí simple, sencillo, con mis palabras (como me decían en la escuela)
Obtuve respuesta casi, casi al instante... El rington del celular avisando un nuevo mensaje me causó algunas cosquillas nerviosas en la panza, robándome una nueva sonrisa. Él también fue claro y concreto: ¿te parece cenar juntos el viernes?
Al principio me pareció un tanto desesperado (mi abuela diría que no hay nada que me venga bien) Pero eneguida me di cuenta que no hay muchas vueltas para darle al asunto, que ya estamos grandes para la calesita y que tanto giro y giro, aburre y marea...
Así que mi respuesta, fue un "me encantaría" con olorcito a sí rotundo, pero coqueto.
Después de un rato largo, y empezar a imaginar en qué me pongo, dónde nos encotraremos, si me gustará cuando vuelva a verlo y hasta cerrar los ojos con fuerza para recordar nuevamente su cara, me di cuenta que recién hoy es martes... ¡¡En cuatro días pueden pasar tantas cosas!!
Cuando estaba saliendo de la muestra de arte de mi amiga Laura, recibí un nuevo mensaje de Hernán con su dirección de mail sumado a un mensaje claro, animado y despejado: falta mucho para el viernes, no? :)
Al llegar a casa lo agregué en mis contactos y casi al instante, apareció una ventanita de chat con una foto de sus claros y profundos ojos azules, diciendo hola.
Todavía seguimos charlando.

Un éxito rotundo...

El nuevo flequillo resultó muy bienvenido por todos aquellos que me conocen, y debo admitir que por algunos extraños también.
Sobre todo con esos con quienes te cruzás miradas poderosas entre los agujeritos que quedan con las nucas viajantes de un colectivo o con esos que te pasan finito por la misma vereda que caminás y los ojos hacen el mayor ángulo posible para seguir el mismo recorrido...
Siempre me pregunté qué pasaría entre esas personas que se miran tanto durante un trayecto... Y diría que hoy puedo comenzar a responder algunas de esas dudas... Sí, porque un extraño de ojos azules y pestañas tupidas, sin nombre ni religión, me devolvió una de las tantas miradas tímidas con una sonrisa de dientes súper blancos.
Yo estaba sentada en el primer asiento de dos, justo detrás de la puerta del medio de esos colectivos largos... Él, unos asientos más adelante. El muy caballero le cedió el lugar a una mujer que subió con dos niños con edad de jardín de infantes y por eso quedó paradito justo enfrente mío. No había tanta gente y enseguida lo descubrí: vestido con jeans azules, remera blanca, zapatillas cancheras, y unas manos blancas, con dedos largos, de apariencia suave y muy tentadoras... Ya les conté acerca del color de sus ojos... pero no aún no mencioné la profundidad de su mirada... Hacía tiempo que no sentía una mirada tan intensa y mucho menos que me pusiera así de nerviosa...
Deben haber sido seis o siete cuadras, de cruces entre miradas celestes y marrones, gestos nerviosos y algunas sonrisas. Cuadras que me resultaron kilómetros. Pero tiempo suficiente para que además de robarme una mueca simpática, el apuesto joven logre escribir diez números en un papelito arrancado de un cuaderno de facultad y antes de bajarse me lo dejara apoyado en una de las manos que tenía sobre mi cartera.
Este es mi número de celular, me dijo. Y si me llamás, te cuento un secreto.
Se llama Hernán. Y muero de ansiedad por develar el misterio...

16 de octubre de 2009

Me gusta ser mujer...


Cuando Nacha Guevara cantaba frente al espejo y escribía con rouge colorado mensajes para levantarse el autoestima, ¿ya estaba en la edad de la menopausia?

Me hubiera encantado poder coincidir, pero después de 45 días justo tocó el viernes a la noche ese día del mes en que más ganas me dan de meterme en la cama hecha un ovillo de lana, mirar la tele y hacer micro siestas hasta que caigo rendida al sommier de doble plaza.
Durante mi caminata vespertina, un hombre que pasó por al lado mío, me dijo una suerte de piropo que después de haberme robado una sonrisa, me dejó pensando el resto del día como si fuera una especie de enigma a resolver.

"No te tapes tanto mujer", me dijo al ver que me cerraba el saco negro y largo que muchas veces actúa como una suerte de escondite, más allá de que el frío y el viento de la ribera porteña ameritara su uso.

El mensaje de esas palabras en un día como este, resultó contradictorio... Y como no logré desabrochar la "capa tapa-teta"para mostrar lo que dios me dió, me fui a la peluquería y le pedí a mi bendito manos de tijeras Mateo que cambie mi look. Como premio a mi gran semana laboral y de alguna manera celebrar esta nueva apertura, ahora sí podría mirarme en el espejo, guiñarme un ojo y pensar en todo lo que, a pesar de todo, me gusta ser mujer.

14 de octubre de 2009

Decreto Siesta

En un día como hoy, creo que estaríamos todos de acuerdo en que no habría mejor actividad que dormir la siesta, tapados hasta el cuello, asomando los ojitos entreabiertos y somnolientos por el borde de las sábanas para chusmear qué escena de una película "romati-maricona" emiten por decimo cuarta vez en la tele...

Demás está mencionar lo difícil que resulta levantarse de la cama mullida y calentita cuando el despertador suena a las 7 a.m. y se oye desde afuera, la suave llovizna que golpea las hojas de los árboles y logra parecerse a una reconfortante canción de cuna...

Afortunadamente, todas las mañanas trabajo de una profesión que me encanta y divierte tanto que fue sencillo iniciar la ceremonia matutina con destino a Palermo Soho...

Pero admito que es inevitable que la energía se transforme a medida fui me fui peribiendo cada vez más frenada y detenida por un tránsito Imposible (con mayúscula) en la Ciudad de Buenos Aires. ¿De dónde salen tantos autos las mañanas de lluvia? O será que en estas ocasiones se cumple la teoría de que como a la mayoría de la gente le resulta tan difícil iniciar su jornada en un día gris, lluvioso y frío (que raramente parece primaveral), el resto del engranaje que suele funcionar con normalidad también se atrasa y pone más lento...

Lo cierto es que debemos recordar y hacer caso al refrán "al mal tiempo buena cara" y encarar con la mejor de las actitudes nuestro día...

¿Acaso no sabés que el universo no sería el mismo sin el aporte de nuestro trabajo? Nuestra contribución también es fundamental en un día de lluvia. Logremos transformar la energía del 99% de humedad, pelo indomable y fiaca concentrada y entre todos hacer que la próxima mañana que nos despierte la lluvia golpeando sobre las hojas de los árboles, logremos reflejar el sol en nuestras miradas.

¡Qué poética! Debe ser la lluvia...

13 de octubre de 2009

Corazón sin agujeritos


Estoy de acuerdo con eso de que en primavera junto con las flores y los primeros calorcitos renace el amor.

Ese calor que nos otorga una energía casi desbordante de ilusión y parece que renueva la imaginación.

Y además de las condiciones pre-estivales y de haber transitado un invierno gris, frío y solitario, me atrevo a admitir que estoy nuevamente preparada, lista y pronta para recibir a un nuevo y buen AMOR.

Mi corazón ya logró cicatrizar viejas heridas, causadas por desilusiones, engaños y mentiras innecesarias. Y adquirió el flamante rojo de la pasión efervescente. Y otra vez está atento a recibir las señales de un escenario contradictorio que se resiste a la entrega sincera, absoluta y única del amor para y entre dos personas.

Afirmo que estoy preparada para saltar los obstáculos que el camino me enseñará a distinguir para llegar a buen puerto.

Estoy expetante, sonriente, desprejuiciada y plena.

¿Alguien se lo querría perder?

12 de octubre de 2009

Una quincena de años...

Hoy tuve un feriado social con mis buenas amigas. Preparé almuerzo para dos y a la tarde sumamos una más a la ronda de mates y muffins de chocolate y nueces recién horneados... Muchas risas, bastante análisis, algunos planes, sinceros intentos de resolver algunos problemas que afectan, principalmente, a nuestra generación... y cero estudio, pero sin culpas.
Y entre tantas cosas para contar, recordamos a nuestros primeros amores... esos que surgieron cuando estábamos transitando la transformación de niñas a adolescentes, cuando el pelo no era ni lacio ni enrulado, cuando el cuerpo experimentaba cambios inexplicables que sumado a una época de moda casi nefasta, intentábamos gustarle a ese chico que nos hizo conocer las (maravillosas) mariposas en la panza cada vez que lo veíamos...
Y afortunadamente volví a recordarlo a él, a Carlos Salas, mi primer amor imposible en los inicios de mi adolescencia...
Tres años escrbiéndole cartas de amor y poemas empalagosos; cientos de llamadas por teléfono, mensajes en el contestador, chocolates para la semana de la dulzura, regalos de cumpleaños y hasta canciones de amor dedicadas en la radio...
Y hoy, después de más de quince años me di cuenta que sólo una vez tuve la oportunidad de verlo a la distancia del "face to face" y escucharle la voz en vivo y en directo, una sola ocasión en tres años para reconfirmar el verde de los ojos que siempre me miraron como la "vecinita de enfrente", pero que me dieron la fortuna de haber conocido por primera vez el desenfreno del amor...
Donde quieras que estés Carlos Salas, gracias!!
Fue maravilloso...

11 de octubre de 2009

Siempre hay una primera vez...

Mis amigas siempre me pidieron que escribiera un libro con todas las historias que contaba. Y yo siempre les decía "mirá que esa historia te la robo para mi libro". Estábamos en concordancia, en sintonía, pensando que la escritura era una de las fortalezas que no podía dejar de compartir.
Y tener la idea rondando en la cabeza de una mujer de GÉMINIS como yo, no es una tarea fácil: se va y vuelve transformado, se pierde por un tiempo pero retorna con más ímpetu que antes, se renueva, se comenta, se boceta y al final después de un análisis profundo entre "las gemelas", se pone en práctica...
En la era de la comunicación digital, rápida y reciclable, crear en un blog es lo más parecido a escribir un libro. Te presento al GÉMINIS TOUR.
BIENVENIDO. Que lo DISFRUTES.