9 de marzo de 2010

El brillo de sus ojos

Desde hace unos días noto que mi estado de ánimo está en un nivel inferior, un escalón abajo y sin fuerza para subir...
Pienso en las posibles causas y sus consecuencias.
Son varias, pero ninguna me termina de conformar. Porque en realidad no es una en su totalidad. Tampoco es la mezcla de todas, que tampoco son tantas...
Es una sensación extraña... como si estuviera deshiciéndome de algo, o mejor dicho, algo se estuviera esfumando de a poco de adentro mío, al mejor estilo evaporación.
Entonces me pregunto qué puede ser tan volátil y etéreo como para que me cause ese efecto de vacío y desinflado.
Y no hay nada de lo que haya estado pensando que realmente cumpla las expectativas a mi respuesta...
Hasta que anoche me desperté a las 3 a.m. entre una mezcla de angustia y ahogo, con la respuesta en la memoria de los sueños: el brillo de mis ojos me pregunta por él, y no sé a dónde está...
Tampoco me queda su canción, sólo su tono alejado mezclado con un susurro secreto...

Cómo trasnformar este efecto con sabor a poco, para que vuelva el regalo del amor...
Sana, sana... colita de rana...
Si no pasa hoy, pasará mañana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario